CONVERSACIONES CON ESMERALDA


He quedado con Esmeralda en el Circulo Católico a las nueve de la mañana. Cuando yo he llegado ella ya estaba allí. Nos hemos dado un fuerte abrazo y la he felicitado por su libro: “Interiores”. Un libro de aquellos que te secuestran del tiempo existencial para llevarte al país del no-tiempo. Ese bello lugar donde me he podido emocionar con cada una de sus historias, y donde las palabras de los otros, se han convertido en mis propias palabras, zarandeado mi alma y mis sentimientos. En la vida, de tanto en tanto, uno tiene la suerte de encontrarse con esas joyas que te iluminan la existencia, que te la zarandean, ya sea a través de una persona, de un ángel, de una voz, de un libro, de una profesora, de una película, de un jefe, de una relación. Todo aquello que te ensancha el alma y la ilumina. Me gusta la palabra zarandear (agitar o mover de un lado a otro con rapidez y energía a alguien o algo). Pedimos dos cortados. Un lápiz y algunos folios en blanco descansan encima de la vieja mesa de madera. Le digo que siento no haber podido ir al taller de escritura Creativa, cuando leí el mensaje de Chelo, ya era demasiado tarde. El correo electrónico no me funciona bien. Le explico que en julio coincidí con Borja en un curso de escritura, y que desde entonces no he vuelto a ver a nadie del grupo. Qué bien lo pasamos en su casa celebrando la comida de final de curso; son esos hermosos recuerdos, los que uno guarda en la mochila de los momentos buenos de la vida; y me pregunto qué habrá sido de Carlos, de Francesc y del resto de compañeros. Se me hace presente la imagen de la Catedral, y la de los tejados antiguos, de esa parte bella de Barcelona.
Saboreamos el cortado, y me dice que puedo explicarle lo que quiera. Le explico que el Circulo Católico es una entidad con mucha solera y tradición en Badalona, el local dispone de un bonito teatro. Sabes una vez vine a ver actuar al humorista Gila. A veces suelo venir a desayunar pues me gustan los lugares que son puntos de referencia para mi ciudad. Le digo que soy una badoadicta. Una fiel enamorada de Badalona. El Miquel Carreras, que fue el fundador en Badalona de la Asociación del Cáncer, es uno de los encargados de la gestión del bar y un referente solidario para la ciudad. Si miro hacia el pasado, lo primero en lo que pienso, es en la enfermedad de mi padre. Era una enfermedad totalmente desconocida, de esas que hoy en día se denominan enfermedades raras. Lo trataron en el hospital Ramón y Cajal de Madrid. Fueron unos años duros y oscuros. De esos recuerdos te hablaré otro día, hoy prefiero no entrar en detalles.
Sabes Esmeralda desde que realice el curso de prosa poética que tú impartías, Francisco Umbral, me ha acompañado como libro de cabecera. Quién me lo iba a decir a mí, cuando nos propusiste la lectura de: “Mortal y Rosa”, que me impactaría tanto. Me preguntas si he vuelto hacer algún otro curso en el Ateneu, sí hice el curso de Cuento Infantil I, con Marta Luna, y gracias a las lecturas que nos propuso, y a un programa de radio que escucho cada mañana, no sé si tú lo has escuchado alguna vez se llama “El Gallo” y lo emiten en Máxima FM, me inspiré para hacer algunos cuentos porqué es un programa con una onda muy expansiva; lo digo en el sentido que sus protagonistas transmiten energías positivas, y hoy que vivimos momentos tan complicados, apetece humedecerse con alguna que otra lluvia fina de buen humor. Por cierto, por algún archivador anda un medio proyecto sin finalizar, quién sabe quizás algún día!
La memoria es muy inquieta salta por los recuerdos, como mariposa, de flor en flor, y esta mañana al salir del metro pensaba en que los escenarios de ahora nada tienen que ver con otros escenarios del pasado. Que a qué me refiero con la palabra escenarios. A escenarios políticos. Mis sensaciones ahora son diferentes, es como si todo careciese de emotividad, y la frialdad se hubiese extendido como una fina capa de telo por encima del corazón de los dirigentes políticos, o quién sabe quizás hasta de nuestro sentir como ciudadanos. Pegados nuestros ojos a las pantallas planas de los móviles nos hemos convertidos en zombis vacíos de intencionalidad amatoria, social y política.

Badalona, 30 de enero de 2014

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