EL AUSENTE

Una vez, al nombrarte, cuando tu nombre era un trozo de cielo que se deshacía en mi boca, te recordé. Son palabras exactas. Te recuerdo desde este presente que rememora con nostalgia el ayer. Pero en este momento concreto, justo ahora, el recuerdo me inunda hasta el extremo que vibro con cada nuevo pensamiento que me habla de ti. Eres el recuerdo de mi mundo. Me dejo llevar tan lejos cada vez que te nombro que me condeno dulcemente a perder los contornos de toda realidad. Y me pongo contenta y alborotada, antes de que llegue la luna iluminando todas las aceras, al desmenuzar entre mis dedos cada uno de mis anhelos, y al llegar la noche el viento azotando las ramas de sus delicadas hojas mece el sueño de esta música constante.

Tú, el ausente, disfrazas tu ausencia con silencios y yo desde lejos visto mi ser con todas las palabras que me saben a ti.

Badalona, 9 d’abril de 2013

Comentaris